Con su habitual violencia y humor ácido, Michael Moore no pierde, tampoco en este documental, su mirada algo ingenua, romántica y su hermosa capacidad didáctica, sosteniendo el relato a un buen ritmo y con un torbellino de imágenes bien articulados.
Es una mirada sobre la modalidad neoliberal del capitalismo. No es un documental anticapitalista. De hecho, plantea que Ronald Regan es el comienzo del fin del capitalismo de bienestar, asunto que forma parte del consenso -así sea a favor o en contra- predominante en el mundillo de los economistas, y Moore elogia la etapa previa; la que recorrió su infancia, la del estado de bienestar. Pero recordando que también se sostenía en base a las habituales carnicerías que por todo el mundo realizan los Estados Unidos.
